El pánico de la gripe porcina

Ya llevo dos días evitando salir a la calle o salir lo menos posible a causa del virus de la influenza o gripe porcina que está atacando al país. En los noticieros no se hablan de otra cosa, en las calles la mayoría de la gente se observa usando tapabocas y por el momento están suspendidas actividades escolares hasta nuevo aviso en todo el país, incluso se han llegado a cancelar eventos masivos como conciertos, partidos deportivos, se cerraron cines, restaurantes y antros en la Ciudad de México principalmente.

Las medidas sanitarias que las autoridades insisten en que se sigan, creo que son básicas y que todas las personas sin necesidad de que se presenten casos como este deberiamos seguir. Lavarse frecuentemente las manos, desinfectar alimentos y cubiertos, no compartir utensilios y taparse la boca al toser o estornudar es algo que se tiene que hacer siempre. Pero es indiscutible que en México no se tiene un sistema sanitario eficiente y aqui están las consecuencias, ya que somos el país más vulnerable ante el virus y con mayor incidencia de casos con las peores consecuncias. Hay muchas contradicciones respecto a la información que se ha dado según dicen las noticias locales, las versiones oficiales no se apegan a la realidad de los casos, algunos opinan que el cierre de lugares públicos ha sido una exageración, otros dicen que el tapabocas no sirve de nada ya que algunos ni siquiera lo utilizan adecuadamente, además de que al haber escasez no se pueden estar cambiando frecuentemente, porque han sido insuficientes para repartir a la población y las pocas farmacias que los tienen los estan vendiendo caros.

La recomendación más válida sigue siendo tomar nuestras precauciones sin caer en pánico ni exagerar las medidas preventivas, ni maximizar los síntomas porque ya habido personas hipocondriacas que por un dolor de cabeza sienten que se están muriendo y saturan los hospitales haciendo menos eficientes los servicios médicos.